La última pareja campeona del certamen explicó detalladamente todo lo sucedido. La bailarina dijo que su relación con Hoppe está “en un sube y baja”
La espera se terminó. Fede Bal y Laurita Fernández, los últimos campeones del Bailando, volvieron a las pistas del certamen conducido por Marcelo Tinelli. Pero, por supuesto, lo más esperado era la palabra de la pareja respecto al escándalo que protagonizaron el hijo de Carmen Barbieri con Barbie Vélez.
El actor y la bailarina realizaron un discurso que duró poco menos de una hora en el que casi ni tuvo que interrumpir Tinelli para hacer acotaciones. Luego, también, Laurita Fernández dio su punto de vista sobre el conflicto en el que se vio involucrada, ya que Barbie los había acusado de ser amantes.
Detalles más, detalles menos, Fede Bal revivió el relato que ya había realizado en los medios contando que el año pasado se venía peleando con su (ahora) ex pareja. A pesar de eso se fueron de vacaciones juntos a Europa pero a su regreso las cosas empeoraron aún más, por lo tanto ella se fue del hogar que compartían en Belgrano. Sin embargo, en una madrugada el actor regresó a su hogar después de hacer una presencia en un boliche y se encontró con su ex pareja en su casa. Ella le revisó el celular y vio el ya mencionado mensaje que le envió Flor de la Vsobre Laurita Fernández, diciendo que pensaba en él.
"Me empezó a agredir, a destrozar el departamento. Todo está en manos de la Justicia, no voy a entrar a profundizar. Yo claramente intento frenarla porque empezó una agresividad incontrolable. Una mujer en estado de crisis que no puedo controlar. Si llamaba a la policía, que es lo que hay que hacer, es difícil porque al ser personas tan populares siempre sale una foto", explicó el actor.
"Soy el principal interesado en que se sepa la verdad. No vengo acá a hacerle mal a nadie. Vengo acá a trabajar. Soy un tipo de 26 años y me vi envuelto en una acusación gravísima, una mancha enorme en mi nombre y mi carrera. Estoy completamente a favor de Ni una menos. Si sufrís de violencia de género denunciá que hay gente que se ocupa, hay una línea que es el 114. Hay gente que realmente está viviendo violencia de género: a Bárbara nunca le levanté una mano", siguió.
Lo más destacado de la noche ocurrió cuando Soledad Silveyrase metió en el discurso y dijo que lo primero que debería haber hecho es irse de ahí, a pesar de los destrozos que podría estar causando la joven, y después denunciarlo a la policía. Sin embargo, él dijo que no tuvo opción más que quedarse porque ella "atentaba contra su propia vida" y que "hubo un principio de incendio" y él quiso evitarlo.
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